29 Jun Lideresas de las Cuencas Sagradas se reúnen para fortalecer el Buen Vivir a través del Plan Biorregional

“Podemos capacitar a las mujeres para reforestar lo que estamos perdiendo. Ahí debemos trabajar con un incentivo para que esa mujer tenga que dar de comer a sus hijos”
Zoila Merino, lideresa de ORPIO.
Perú-Desde distintos territorios de la Amazonía nor-peruana, lideresas de las organizaciones indígenas parte de la Iniciativa Cuencas Sagradas, se reunieron a discutir los desafíos y retos que atraviesa la biorregión de las Cuencas Sagradas Amazónicas y proponer soluciones adecuadas y posibles.
Rocilda Nunta, técnica Shipibo-conibo del Programa Mujer de la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (AIDESEP); Zoila Merino, lideresa Bora de la Organización Regional de los Pueblos Indígenas del Oriente (ORPIO); Claudia Pérez, representante wampís del Gobierno Territorial Autónomo de la Nación Wampís (GTANW); y Puwanch Kintui Antich, sabia de la achuar, Arustaish Nampir, presidenta del club de madres de Andoas, Hna. Nancy Melendez y 2 menores del Colegio Nuimiat Achuar Warush (comunidad Wijint), delegadas de la Federación de la Nacionalidad Achuar del Perú (FENAP) participaron de la reunión y dialogaron sobre salud, educación, gobernanza, trabajo y soberanía alimentaria

Planificando desde la Amazonía: Plan Biorregional de las Cuencas Sagradas
Desarrollado desde 2017, el Plan Biorregional es un documento vivo construido de manera colaborativa a partir de la visión de las lideresas y los líderes de las organizaciones parte de la Alianza de las Cuencas Sagradas. El Plan apunta a promover el Buen Vivir Amazónico como eje principal en la transición que debe emprenderse para la defensa y protección del bosque Amazónico, de, quienes lo habitan y de todo el planeta.
La Iniciativa Cuencas Sagradas no solo buscar incidir en las políticas de los gobiernos de Perú y Ecuador, sino también en las agendas ciudadanas, planteando la incorporación de la visión indígena como una forma de estimular una transformación socio-ecológica, entendiendo que el cambio de paradigma está en cómo los temas amazónicos y ambientales se incorporan en el quehacer urbano.
Desafíos en territorios
“Hay muchas migraciones de jóvenes, hombres y mujeres, que a falta de estudios, que ha falta de economía han migrado, porque hoy en día el mundo ha cambiado, ya necesitan de otras aspiraciones […]. Entonces cuando hay esa escuela de preparación en tema culturales, ellos van a quedar en su comunidad […] ¿Y qué hacen allá?, cojen enfermedades […] porque no estamos hablando, conversando con ellos permanentemente”
Zoila Merino, lideresa de ORPIO.
La falta de conectividad y acceso a la información continúan siendo algunas de las brechas más importantes entre la Amazonía y las grandes ciudades, y, en el actual contexto de emergencia sanitaria la posibilidad de acceder a internet y con ello a la educación virtual ha llevado a cientos de menores y jóvenes a perder cerca de 2 años educativos.
En dicho contexto, las juventudes ven sus oportunidades y alternativas aún más restringidas, limitándose a las paupérrimas y escasas opciones de trabajo provistas por las actividades extractivas que se desarrollan en sus territorios, tales como; mano de obra en cultivos de palma, tala y comercio de topa, minería ilegal e incluso prostitución.
Frente a dichas situaciones las lideresas de las Cuencas Sagradas buscan aportar al Plan Biorregional en pos de una transición pensada desde el Buen Vivir amazónico, que fortalezcan la identidad cultural, preserve sus saberes ancestrales y proteja sus territorios.
Salud y Educación intercultural
“Desde AIDESEP estamos capacitando a las promotoras indígenas en plantas medicinales, y también en medicina occidental. Sobre el tema de plantas medicinales y enfermedades etnoculturales es dictado por las sabias indígenas, y las enfermedades occidentales es capacitado por un personal de salud, formado en salud intercultural”
Rocilda Nunta, AIDESEP

Las lideresas coincidieron en que uno de los temas más críticos es la salud. Existe una urgente necesidad de establecer y promover la salud intercultural a fin de brindar atención primaria con pertinencia étnica y avanzar hacia un reconocimiento e institucionalización de la medicina ancestral. Ello, de acuerdo a las lideresas, es posible si se capacita a las promotoras y promotores de salud indígena, se implementa la atención bilingüe y se respetan los principios culturales de cada nación indígena.
A lo anterior se suma el hecho de que para el 2021 no ha sido otorgado el financiamiento para el «Plan de intervención del Ministerio de Salud para Comunidades Indígenas y Centros Poblados Rurales de la Amazonía frente a la emergencia del COVID-19”, pese a los reiterados esfuerzos y solicitudes realizadas al Ministerio de Salud (MINSA) y al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) por parte de las organizaciones indígenas y sus aliados. Cabe señalar que la falta de seguimiento del mismo afecta directamente la vida de las comunidades, tal como sucede en el actual proceso de vacunación.
Al respecto, la Defensoría del Pueblo ha señalado: “Urge intensificar la campaña de difusión sobre vacunación contra COVID-19 en lenguas indígenas. Según el MINSA se vacunarán a 393 287 personas indígenas de 3240 comunidades nativas; sin embargo, se debe ampliar la meta incorporando a la población indígena andina de las zonas rurales”. (ver más)
Es recién al 18 de junio, que la Dirección de Pueblos Indígenas u Originarios del MINSA informa sobre la aprobación de una estrategia de vacunación contra COVID-19 para los pueblos indígenas, priorizándose a un total de 3240 comunidades nativas de 11 departamentos amazónicos de todo el país y que se inmunizará a aproximadamente a 393 287 personas indígenas .
Por su parte, Zoila Merino señaló que ORPIO realizó desde mayo una campaña de información sobre la vacunación indígena frente al gran rechazo de la vacunación en las comunidades cercanas a Iquitos en Loreto, realizaron charlas, material informativo, rompiendo así, todo prejuicio en contra de la vacunación.
Además agregó: “Lo que nosotras queremos es capacitar a las mujeres jóvenes en medicinas naturales son eficaces, que ellas se preparen para las enfermedades futuras. Mucho se están perdiendo las medicinas tradicionales, cuando eso es una base importante”.
Salud y educación sexual
Además resaltaron el llamado a promover la educación en salud sexual ante el creciente índice de enfermedades e infecciones de transmisión sexual registrados (ETS e ITS), como el VIH:
“Nos preocupan nuestras hijas y nuestros hijos que se van a trabajar en las empresas, en las palmeras. Últimamente de la frontera están saliendo a las palmeras de Yurimaguas, de Tarapoto, en toda esa zona hay grandes cultivos de palmeras, y ahí es que se ganan estas enfermedades.” menciona la hermana Nancy Melendez en traducción de las madres Achuar de la comunidad de Wijint, Andoas.
Aquí se puede visibilizar el impacto directo de las actividades extractivas en la vida de las comunidades lo cual, sumado a la falta de información y educación sobre el uso de métodos anticonceptivos, se convierte en una gran amenaza:
“Culturalmente en los territorios indígenas no usan los preservativos. Es por cultura. En los Awajún y los Wampís no lo usan. El tema de las enfermedades de transmisión sexual, para la gran mayoría es brujería. […] Te dan otras enfermedades como el cáncer, entonces te han hecho brujería, no es porque tengas alguna enfermedad, eso es lo que se dice”.
Claudia Pérez, representante de la Nación Wampís.
Asimismo, enfatizó el rechazo que se da a la salud preventiva, muchas veces provocado por la falta de pertinencia cultural en el sistema de salud, al no encontrar personal bilingüe ni indígena que brinde las condiciones de confianza necesarias que las pacientes indígenas necesitan para confiar en estos mecanismos de salud: “A veces me pongo en el lugar de mis hermanas de ir a un centro de Salud y que un extraño me esté revisando, debe ser bastante incómodo”.
Educación intercultural
“[…]El pueblo Achuar fundó sus centros de educación para formar sus hijos como líderes defensores del territorio conocedores de sus derechos colectivos… se hizo para educar hijos líderes, con identidad y conozcan sus derechos para defender el territorio integral…”
Nancy Melendez, religiosa a cargo del Colegio Nuimiat Achuar Warush de la Comunidad Achuar de Wijint, Andoas.

Las compañeras de la Nacionalidad Achuar brindaron un gran aporte al hablar del sistema de educación intercultural que ya vienen aplicando en sus comunidades. La enseñanza de los saberes ancestrales indígenas se inserta en la escuela, a través del trabajo voluntario de los “mayores”, dos educadores indígenas bilingües que rotan de manera anual entre los miembros de la comunidad y que busca preservar el saber ancestral y cultural Achuar. “Cada año tenemos a 2 maestros elegidos por la asamblea de padres, son los encargados de transmitir saberes ancestrales, el colegio no se hace ajeno a esos conocimientos. La participación del mayor y la mayor es fundamental para los saberes culturales del pueblo Achuar”.
Además de esto, cuestionó la estandarización de la educación a nivel nacional: “Sentimos que el modelo de educación que imparte a nivel nacional no es el que demanda el pueblo, nos miden con una misma barita, […] no hay una atención diversificada y no vemos que existan derechos a una educación propia, a una educación indigena. No se está dando ese derecho en la práctica. […]
Esta visión educativa inclusiva tiene uno de sus mayores frutos en el trabajo de sistematización realizado sobre medicina ancestral que no solo permite transmitir estos saberes a los niños y las niñas de la escuela de la comunidad, sino que también ha logrado desarrollar un programa de capacitación de promotores en salud indígena en distintas comunidades.
Nuevas economías, soberanía alimentaria y gobernanza
“Podemos capacitar a las mujeres para reforestar lo que estamos perdiendo […], ahí debemos trabajar las mujeres con un incentivo para que esa mujer tenga que dar de comer a sus hijos”
Zoila Merino, lideresa de ORPIO.
Actualmente existen proyectos sobre soberanía alimentaria liderados por mujeres en algunos pueblos de la Amazonía. Biohuertos y chacras con énfasis en cultivo de plantas utilizadas para la medicina ancestral, con fines alimentarios y, potencialmente, de comercialización justa como propuesta para generar nuevas formas de economía y trabajo para la comunidad.

Este modelo pensado a partir de la sabiduría alimentaria de las mujeres necesita replicarse, y ser revalorado en cuanto al liderazgo en la gestión que las mujeres cumplen. Las lideresas de la Iniciativa Cuencas Sagradas en Perú convergen en la necesidad de revalorar el esfuerzo y trabajo que las mujeres realizan a través de beneficios comunitarios y sueldos justos. La falta de reconocimiento del trabajo que las mujeres realizan en labores como el cultivo de yuca y la limpieza de espacios públicos, las que desempeña Arustaish Nampir, presidenta del club de madres en la comunidad de Wijint, perjudica su sostenibilidad y desarrollo.
Sin duda, el acceso a herramientas y capacitación en materia de economías justas tendrá beneficios múltiples y permitirá empoderar a las mujeres y darles autonomía financiera, lo que favorecerá a toda la comunidad. De igual forma, la institucionalización de la paridad de género en los espacios de toma de decisión y gobernanza de las propias organizaciones indígenas marcan un cambio en cómo las mujeres están siendo reconocidas como agentes de cambio en sus comunidades.
Finalmente, remarcar que este diálogo realizado por las lideresas, se establece como un aporte concreto a ser presentado a la ciudadanía, los gobiernos centrales, regionales y distritales con el objetivo de lograr su involucramiento y compromiso.